El conjunto cidiano sucumbió por 25-26 ante el Bathco Balonmano Torrelavega en un encuentro de gran intensidad en el que los rojinegros se mostraron más sólidos que en los anteriores choques
UBU San Pablo Burgos
25
Ibrahim, Cantore, Pinillos (1), Álvaro (10), Claudio (1), Dalmau (2), Juan, -siete incial- Samuel (1), Cristian, Joshua (4), Mile, Espinosa, Raúl (3), Juli, Marcos García, Ernesto (1), Javi (2).
Bathco Balonmano Torrelavega
26
Araujo, Prieto (4), Lombilla (3), Canguiani (3), Casanova (2), D. Hernández (2), Colunga (1), -siete incial- Ábalos, Moreno (4), Crespo, González, Krimer, I. Martínez (3), Serrano (4), David García, Urrutia.
PARCIALES: 3-2 / 8-4 / 9-6 / 10-11 / 12-14 / 15-16 / descanso / 17-16 / 21-20 / 22-23 / 23-26 / 27-28 / 31-31.
ÁRBITROS: Yonatan Lázaro y David Portugal. Excluyeron al entrenador del UBU San Pablo, Nacho González, (min. 42) y a los jugadores Claudio Ramos (min. 42), Pablo Cantore (min. 45) y Javi Rodríguez (min. 54). Por parte del Bathco BM Torrelavega, excluyeron a Marc Ábalos (min. 19), Borja Lombilla (min. 20), Alonso Moreno (min. 47) y Jorge Prieto (min. 50).
El UBU San Pablo Burgos concluye su preparación de pretemporada con una derrota por 25-26 contra el Bathco Balonmano Torrelavega, uno de los claros favoritos al ascenso a liga Asobal. El bloque cidiano cuajó una primera parte muy completa y seria, en la que, no solo aguantó el ritmo de los cántabros, sino que consiguió mandar en el marcador durante buena parte del encuentro, si bien la experiencia y la calidad del conjunto naranja fueron determinantes en el tramo final del choque para acabar llevándose la victoria.
Tanto Burgos como Torrelavega entraron en el encuentro totalmente ‘enchufados’. Los primeros instantes fueron de total intensidad y de altísima velocidad. Se vio a un UBU San Pablo mucho más consolidado como grupo que en anteriores amistosos, trenzando buenas jugadas de ataque, a menudo buscando al pivote. La sucesión de ataques rápidos en las dos porterías se vio frenada por ambos guardametas, que parecían querer pisar el freno del partido en los primeros instantes.
Con todo, no le resultaba fácil al cuadro burgalés encontrar situaciones de tiro y los errores en lanzamientos se traducían en contragolpes de los cántabros. En el minuto 10, con un 4-5, solo Álvaro Torres había conseguido hacer diana en la meta rival.
Las defensas subieron el nivel de agresividad, especialmente la visitante, que complicó el trabajo de continuidad de los cidianos, que hasta el momento había sido muy eficiente. Torrelavega robaba y contraatacaba con relativa facilidad. Así, con un 5-9, Nacho González solicitó tiempo muerto para parar la escalada de juego del rival, que se había hecho dueño y señor del partido por unos minutos. Ibrahim, excelente en portería, impidió que la diferencia fuera mayor, mientras que Torres y Joshua se mantenían como únicos anotadores rojinegros. La exclusión de Marc Ábalos en el 19 facilitó el acercamiento del UBU San Pablo en el marcador (min. 21. 8-10).
En el minuto 22, un robo de balón de Javi Rodríguez propició su anotación fácil a portería vacía y el duelo se igualó (10-10). También la defensa local comenzó a carburar, forzando errores y pérdidas del rival. El partido se volvió equilibrado y emocionante y dos goles de Raúl Blanco dieron la vuelta al marcador en el 28 (13-11), para acabar yendo al descanso con un 14-13.
El receso no sentó bien a ninguno de los dos equipos que convirtieron los primeros instantes del segundo periodo en un correcalles plagado de errores por precipitación. A río revuelto, pareció pescar más el cuadro cidiano que consiguió mantenerse por encima en el marcador durante los primeros 11 minutos, momento a partir del cual Torrelavega cambió a defensa 5-1 para alejar el peligro de su portería.
La exclusión de Claudio Ramos en el 42, junto a la de Nacho González, mermaron el ataque rojinegro que se vio con cinco jugadores en el campo durante varios minutos prolongados por una nueva exclusión, esta vez de Cantore, lo que supuso que los cántabros dieran la vuelta al marcador mediada la segunda mitad (19-20). Aún así, los rojinegros no se fueron del partido y, a pesar de la larga inferioridad, consiguieron mantener la igualdad en el luminoso (min. 48. 21-21). Una nueva exclusión para Burgos, esta vez de Espinosa, se tradujo en una pequeña brecha visitante (21-23), pero los cidianos seguían sin ponérselo fácil a Torrelavega, con una demostración de intensidad en cada acción, que fue premiada con la ovación del público. Las amonestaciones seguían limitando a los locales, que disputaron gran parte del segundo acto en inferioridad numérica.
En el 58, con 25 a 26, la grada de El Plantío decidió empujar a los suyos. La defensa cidiana funcionó como un reloj y a falta de 19 segundos, el UBU San Pablo recuperó el balón para disponer de un último ataque que Nacho González quiso preparar en un tiempo muerto. Pero Samuel logró hilvanar el lanzamiento y el marcador ya no se movió. Buen test para los cidianos que dieron señas de una gran evolución desde el primer choque de pretemporada, si bien con un gran margen de mejora a medida que avance la competición. El próximo sábado, día 26 a las 20:30 horas, los hombres de Nacho González comienzan su andadura en DH Plata ante el Teucro en Pontevedra.