El equipo juvenil del Aislamientos Burgaleses Bm. Burgos se enfrentó este viernes al Ademar, en un partido lleno de aprendizajes y esfuerzo. Aunque el marcador final no fue favorable, los burgaleses demostraron gran coraje y compromiso, dejando claro que su potencial es innegable y que su crecimiento está en marcha.

Durante los primeros minutos, los cidianos tuvieron problemas en ataque, con pérdidas de balón que impidieron acercarse en el marcador. A pesar de estos contratiempos, los burgaleses nunca dejaron de pelear por cada balón y, aunque el resultado al descanso (19-11) no fue el que esperaban, el esfuerzo y la concentración fueron constantes, mostrando una gran mentalidad en cada acción.

La segunda mitad sirvió para seguir trabajando en mejorar aspectos del juego. Con algunas rotaciones, los burgaleses siguieron luchando sin descanso. Cada jugada reflejaba su determinación por mejorar y crecer como equipo.

Aunque el marcador no favoreció al conjunto burgalés, el partido dejó claro que el camino está bien encaminado. El conjunto juvenil, a pesar de los errores cometidos, sigue aprendiendo y creciendo en cada encuentro. Ahora, con la vista puesta en los dos partidos cruciales contra Valladolid, los cidianos seguirán con su objetivo de estar entre los cuatro mejores de Castilla y León, sabiendo que su potencial es enorme y que el trabajo en equipo será su mayor aliado.