El UBU Archicerámica Burgos no pudo superar al Leche Gaza Zamora (14-32) en un mal encuentro de las burgalesas que no estuvieron centradas y se vinieron abajo en la segunda parte.
El choque arrancó con las cidianas descentradas y con falta de confianza. En el minuto 10, el técnico rojinegro, Alejandro Oliva, se vio obligado a solicitar un tiempo muerto para tratar de reconducir la situación y espolear a sus jugadoras, quienes, tras la charla, lograron reaccionar. El juego de las locales mejoró y se llegó al descanso con un prometedor 7-12.
Sin embargo, tras el paso por vestuarios, el bloque burgalés volvió a mostrarse falto de tensión e incapaz de demostrar en la cancha el buen trabajo realizado durante la semana en los entrenamientos. Solo algunas jugadas aisladas ponían luz en un partido sin brillo. A pesar de ello, el equipo burgalés sigue dando muestras de su evolución desde el inicio de temporada y vuelve a mejorar el resultado obtenido en la primera vuelta (37-12).